Day 3: Gifft Hill School Aboard Roseway
Ensenada Honda, Culebra, Puerto Rico
We left Vieques and set sail for Culebra. After that it was an ordinary day on the Roseway, chores being done, active watches, and some sailing lessons. Today leaving Vieques we headed out on the motor, while on the motor we stayed on a course of 100*. Then we set sail when we cleared the tip of Vieques. The sails worked with the wind to send us to Culebra. We arrived at a beach that held the trail to get to Flamenco Beach which held the location of two tanks one in the water the other on land. We left the beach and headed to the Roseway on foot through a trail, once we got to another beach the Roseway got closer to us. We were then able to get on the small boats and head over. When we got to the Roseway we got changed, ate, and did chores. Then we left one part of Culebra and headed to another part of the island to then anchor. We did this so that we would have an easier time getting back to St. John in the morning. We also played a really nice game of salad bowl before the quiet boat.
Nos fuimos de Vieques y nos ponemos de vela para Culebra. Después de eso fue un día ordinario en la Roseway, cumpliendo con los aseos, la vigilia activa, y unas clases de navegación. Hoy cuando dejamos Vieques atrás usábamos el motor, y mientras lo usábamos mantenemos un rumbo de 100 grados. Después levantamos las velas cuando pasamos el puntito de Vieques. Las velas trabajaron juntas con el viento para mandarnos a Culebra. Llegamos a una playa con un sendero que nos dirigía hacia la Playa Flamenco, que era la ubicación de dos tanques, uno en el agua y el otro en la tierra. Nos fuimos de la playa y regresamos a Roseway en pie por el mismo sendero, y una vez que llegamos a la otra playa la Roseway se acercó a nosotrxs. Entonces pudimos subirnos a los chinchorros y regresar. Cuando llegamos a Roseway cambiamos nuestra ropa, cenamos, y hicimos los aseos. Entonces nos fuimos de una área de Culebra para otra para anclar. Lo hicimos para pasarlo más fácilmente regresando a St. John en la mañana. También jugamos un juego de “olla de ensalada” antes de las horas calladas en el barco.